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Elementos artesanales o DIY para transformar una casa en un hogar a través de la decoración

Decorar una casa a la que te acabas de mudar puede ser visto como un desafío o también como una enorme oportunidad de expresión. Se trata de un lienzo en blanco listo para ser transformado en un hogar lleno de personalidad, al que puedas llamar “mi refugio”.

Dicen que “el diablo está en los detalles” y nosotros respondemos que la calidez y el confort también están ahí, en esos pequeños espacios que transforman la atmósfera. Elementos artesanales que se pueden comprar en un mercado artesano o hacer con nuestras propias manos (DIY), como un gran cuadro o un papel pintado de colores para la habitación de los niños, puede ser la diferencia entre una casa-quirófano y un hogar. A continuación, algunas ideas para transformar cuatro paredes en un nidito acogedor.

Murales y papel pintado: Personalidad hasta en la pared

Hay personas que entienden que las paredes son un lienzo para expresarse. La forma en que las decoramos puede tener un impacto profundo en la atmósfera de cada espacio. Por ejemplo, un cuarto en tonos azules o violáceos transmite calma y tranquilidad. Uno en tonos amarillos, energiza. 

Las paredes juegan un papel fundamental y por eso son el eje central de la decoración. Además de pintarlas, una buena idea es hacer un rincón especial con murales o papeles pintados. En el sitio Photowall.com hay opciones originales, ideales para dejar una impronta en la habitación sin correr ningún riesgo gracias a su calidad sueca.

Tanto los murales como el papel pintado ofrecen una forma accesible y versátil de transformar un ambiente, al tiempo que expresan las preferencias de los habitantes de la casa. Un papel selvático para una sala de estar colorida, un mural de ositos para la zona de juego de los más peques. Es una forma muy económica de separar espacios y darle a cada integrante de la familia un lugar para estar más a gusto.

Esculturas y cuadros: Autenticidad y estilo

Desde las primeras tribus de nuestros antepasados, el arte ha sido un medio poderoso para expresar emociones, ideas e historias. Si quieres que tus invitados te pregunten por ese viaje a Berlín, pon ese pedazo del muro que trajiste de recuerdo en un escaparate a la altura de los ojos. 

Incorporar esculturas y cuadros a la decoración del hogar no solo embellece, sino que también ofrece una dimensión cultural y emocional. Una escultura bien ubicada en una entrada o sala de estar puede convertirse en un punto focal, mientras que los cuadros enmarcados pueden contar una historia o llevarnos de paseo a sitios donde fuimos felices.

Adornos y muebles artesanos: El valor extra de lo hecho a mano

Los adornos hechos por otra persona son esos pequeños detalles que le dan un toque especial a nuestro hogar, ya que, a diferencia de los objetos producidos en masa, las piezas artesanales suelen tener un valor intrínseco. Puede tratarse de un pequeño plato de cerámica para dejar las llaves cuando entras a casa o de un mueble de madera hecho a mano. No importa la magnitud, sino el detalle y el mimo con el que fue realizado. 

Los adornos y muebles hechos a mano aportan autenticidad a la decoración del hogar. Además, apoyar el trabajo artesanal no solo ayuda a mantener viva la cultura de lo hecho a mano, sino que también permite que cada objeto tenga un toque único e irrepetible.

¿Cómo olvidarse de la iluminación?

La iluminación es un elemento nuclear a la hora de crear una atmósfera. Las luces cálidas y tenues dan la sensación de un espacio íntimo, mientras que las lámparas con luz fría pueden servir para espacios de trabajo dentro del hogar.

Apuntar una luz a un cuadro o a un mural puede servir para resaltarlo, de la misma forma que una lámpara de pie junto a un sofá de un cuerpo equivale a decir “espacio de lectura”. Las personas que disfrutan pasar un buen rato hojeando libros de todo tipo o incluso periódicos no tardan en identificar ese sillón como uno de los espacios preferidos de la casa. 

Las lámparas son en sí un elemento decorativo. Lámparas colgantes en la cocina o comedor pueden añadir un toque contemporáneo y sofisticado, mientras que lámparas de pie o de mesa en el salón o dormitorio pueden crear rincones acogedores perfectos para la lectura o el descanso. 

Fotos de la familia: El toque verdadero de un hogar

Es raro ver paredes decoradas con fotos de la familia en las revistas de decoración, incluso cuando allí se presentan casas reales, habitadas por personas reales. Sin embargo, las fotos de la familia son mucho más que una decoración, son una mirilla al pasado.

Poner fotos enmarcadas de seres queridos en estanterías, paredes o mesas auxiliares puede hacer que pasar por un pasillo o mirar a un mueble te arranque una sonrisa. Son una especie de recordatorio de esos buenos momentos y también un homenaje a personas que ya no están.

La forma de exponer las fotos también juega un papel importante. Un collage de fotos en la pared puede narrar la historia de la familia, mientras que un conjunto de marcos iguales o en diferentes estilos puede añadir un toque artístico al salón. Además, estas fotos pueden colocarse en cualquier habitación, desde el dormitorio hasta la oficina, creando una sensación de conexión y pertenencia en cada rincón del hogar.

Meninas artesanales

Cada una de nuestras meninas es una obra de arte hecha a mano e inspiradas en la elegancia clásica.